
En muchos jardines o terrenos vacios de cada día más ciudades y paises, se esta desarrollando una gran actividad: la
«agricultura urbana», espacios comunitarios en los que podamos plantar lechugas, tomates, escarolas, pimientos . . . junto a nuestros vecinos, hijos, padres . . . Se trata sin duda de una gran idea no sólo para disponer de verdura con todo su sabor y nutrientes, sino que será una gran oportunidad para fomentar las relaciones sociales y familiares. Se forma de esta manera un punto de encuentro para la convivencia y la realización.
De igual manera, tu balcón puede convertirse en una pequeña huerta que te producirá buenos vegetales al tiempo que será una gran oportunidad de aprendizaje para toda la familia.